domingo, 2 de septiembre de 2012

Día 1 - Me voy

(Avión Madrid - Charlotte. Ni idea de la hora)

Después de pasar la noche en Madrid con mi novia (mi novia ^^), ella y su hermanito me llevan a las 6am al aeropuerto. Allí tras despedirnos (muy contenta en realidad) procedo a pasar tropecientos controles de seguridad: que si llevo jamón, armas o caracoles (sí, CARACOLES), que si el pasaporte, la tarjeta de embarque o el ESTA. Estoy acojonada con perder el avión y encima me dicen que solo siga a la multitud. POS VALE.

Ya en la puerta de embarque (la definitiva, por Dios) me acuerdo del desayuno. Muy bien Ga. Pues un twix y pista. Del que le doy la mitad a una niña que no deja de mirarme.

En el avión ya, mi asiento da a la ventana. Y con ventana quiero decir ALA.

A mi lado se sienta un chico que parece muy majo, pero yo me quedo dormida y no mentero ni del despegue. OJO, que nos ponen mantita y almohada en cada asiento. ASÍ SÍ, COÑO.

Al despertarme Pablo, mi compañero de asiento, me cuenta que se va a Los Ángeles y a un parque natural, en el que acaba de salir un brote de un virus mortal que transmiten los roedores. Qué yanki todo.

La comida es aceptable (dios, nos hinchan a comer para no aburrirnos).

(...)

Modo histérica ON. Y aún faltan tres horas para llegar. Je.

(...) Charlotte - NYC

¡Al fin! He pasado como una profesional todos los controles y aquí estoy. Los policías son extrañamente amables.

Me las he arreglado solita. La primeras sensaciones de EEUU son:

- La gente parece muy amable.
- Todo huele a comida rápida.
- Desde el avión se ve VERDE y no color cemento. Qué raro.

Ya he conocido a más españoles. Me temo que de inglés... Poco.

(...)

Y al fin en mi cama. Ay Dios los americanos. Nada más llegar nos tocan tres colgadas. Colgadas o que eran muy majas, lo importante es que al final nos han ayudado a llegar. (Ya explicaré esa aparente contradicción más adelante).

La habitación es mucho más grande de lo que imaginaba. Y la comida carísima ($7 una caja de cereales wtf).

Mi primera cena es pasta precocinada al microondas. Y me temo que la de todas las noches a partir de ahora.

En fin. Espero dormir bien, porque llevo 23 horas despierta.

Solo me agobia que no hay wifi y no he podido dar aún señales de vida en España. Pero mañana lo arreglaré :)

(Apenas he tenido batería así que no hay más fotos que una de mi suculenta cena. Ains.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario